Un adecuado aislamiento térmico en un edificio o una vivienda es fundamental para garantizar un calor eficiente. De hecho, un buen aislamiento puede suponer hasta un 60 por ciento de ahorro. Además de disminuir la demanda y la factura energética así como las emisiones de CO2, las planchas realizadas con el poliestireno expandido permiten reducir el ruido, proteger frente a la humedad y alargar la vida útil del edificio.
En la actualidad, en muchos edificios se opta por el sistema SATE, que proporciona excelentes ventajas térmicas, es especialmente fácil de instalar y se pueden realizar en cualquier forma y medida.
Este tipo de aislamiento es también una elección cada vez más frecuente en edificios que permanecen cerrados algunos meses de invierno, como ocurre en muchos hoteles en Mallorca. Los veranos son cada vez más calurosos y el consumo de aire acondicionado también se ha disparado.
El sistema SATE es ideal tanto para obra nueva como para reformas. En una obra ya realizada, el SATE se puede instalar en el exterior sin afectar al interior y a las personas que viven o trabajan en ese edificio.
El poliestireno expandido se caracteriza por su extraordinaria capacidad de aislamiento térmico frente al calor y al frío, lo que lo convierte en un material muy versátil y usado en distintos ámbitos: desde la construcción al envasado y embalaje de alimentos.
Tal y como indica la Asociación Nacional de Poliestireno Expandido (ANAPE), esta capacidad «se debe a la propia estructura del material que esencialmente consiste en aire ocluido dentro de una estructura celular conformada por el poliestireno. Aproximadamente un 98% del volumen del material es aire y únicamente un 2% materia sólida (poliestireno). De todos es conocido que el aire en reposo es un excelente aislante térmico.»
